Siempre he escuchado que cuando tus amigas comienzan a
casarte las ganas de hacerlo tú aparecen o aumentan…
Comienzo a pensar y darme cuenta de que soy adulta en el momento
en el que pasamos de tener invitaciones a fiestas de XV años para las de bodas.
Cuando estaba en esa época tampoco fueron tantas las invitaciones que recibí y
muchas menos las fiestas a las que fui gracias a los pocos permisos de salir
que tenía/tengo por lo que quizás pasé más de golpe a la etapa en la que estoy
ahora y el shock es más grande.
Cuando me pidieron ser dama de honor fue de las coas más
bonitas ya que tienes que ser muy especial para esa persona como para que te dé
tal distinción, sin embargo, la experiencia comenzó a ser un reto de paciencia
que afortunadamente salió bien.
Uno ve programas de televisión en los que estereotipan
muchas veces a las novias como las personas más histéricas y mandonas del mundo…
este no fue el caso. Sin embargo, tuvimos (si, porque sé que no solo fui yo
sino las demás damas) que enfrentarnos a una dama que quería controlarlo todo a
su manera y que en lugar de avanzar nos hacía ir más lento o hacia atrás.
Al final de todo, la despedida de soltera y la boda salieron
muy bonitas, la novia pasó momentos muy felices (o eso me parece) lo cual nos
hace felices a nosotras que somos sus amigas.
Durante toda mi vida he tenido más amigos hombres que
mujeres, en cada una de las etapas de mi vida (a excepción de la secundaria)
eso se ha aplicado como una regla casi casi, la cual no es buscada por mí, sino
que simplemente se da. Pero me alegra mucho saber que tengo muy buenas amigas,
a las cuales puedo ver en un futuro a mi lado.
… totalmente cierto, aún más cuando sabes que estás con la
persona indicada.
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