12/31/2015

El recuento de los daños... 2015

Estuve esperando a que de verdad fuera el último día del año para escribir esto...


El 2015 fue un año maravilloso en mi vida, al iniciar (y lo se porque antes de escribir esto leí el post del año pasado) tenía ciertos miedos e inseguridades que me acompañaron una parte del año, sin embargo en cuanto te dejas fluir todo comienza a acomodarse como se debe.

Este año en lo académico fui a mi graduación, di el discurso de despedida, terminé la tesis y me titulé con mención honorífica (coff coff), además, comencé un diplomado en un municipio cercano y luego de diez meses de viajar una vez al mes lo terminé, tomé dos cursos, intenté entrar a una universidad en línea para una segunda licenciatura pero al final no fue lo que esperaba.

En cuestiones laborales los primeros meses fueron difíciles, ya que estuve deprimida por no conseguir un trabajo (que realmente no buscaba porque no sabía ni lo que quería), sin embargo, poco después todo se fue acomodando y comencé algo que me encanta hacer, al principio con mucho miedo, pero a la vez muchas emociones ya que implicaba vivir lejos de casa (exageración total ya que solo era un mes), pero después comencé a trabajar en un lugar que me gusta, me resulta interesante y sobretodo está lleno de buenas personas y me encuentro a la expectativa de los nuevos planes y esperando deseosa a que se cumplan.

Este año también sucedieron cosas triste, como la partida de Pancita, quien se fue el 16 de noviembre, a quien sigo y estoy segura seguiré extrañando, aunque poco a poco me he acostumbrado a no esperar encontrármelo por los rincones.

También, este 2015 pude viajar, al fin me subí a un avión, salí de mi estado y conocí cosas muy bonitas, viví un mes en el lugar donde espero poder vivir de manera definitiva en un futuro y fue el año que más he estado viajando aunque sea a lugares cercanos. Además, de por supuesto haber asistido a la fiesta familiar en casa de mi abuelita, donde noté que eso de mi juventud y amanecerme en la fiesta ya se está perdiendo.

Este año leí más de 20 libros, no se con exactitud cuantos, porque desde el número 16 o 17 dejé de contar. Pero fue un año muy bueno en ese aspecto. Fui a un concierto al que me moría de ganas de ir.

En lo sentimental estoy más feliz que nunca, hace un año sentía de algún modo ciertas inseguridades ya que nos enfrentábamos a lo desconocido y a una relación "a distancia", aunque para ser sincera yo no lo siento así, nos vemos mucho y siento que seguimos platicando, lo único diferente es que ahora tenemos más responsabilidades como el trabajar para que el futuro juntos esté más cerquita. 
También, ambos conocimos a más integrantes de la familia del otro.

Faltan muchas cosas por vivir, muchas metas por cumplir, pero termino el año de manera muy positiva, sabiendo que mejores cosas están por venir y esperando a que el 2016 me sorprenda aún mas.





... al final nada se escapó.




Chio Ovilla